Gile Bae y su amor por la música clásica: "Nunca dejas de aprender..."

Gile Bae , pianista de sonido refinado y profundo, con mil colores y matices, es invitado a « La Milanesiana », una obra concebida y dirigida por Elisabetta Sgarbi , esta noche en el Piccolo Teatro Paolo Grassi , a las 21:00 h. El programa incluye la Lectio magistralis del filósofo y ensayista Massimo Cacciari , introducida por Elisabetta Sgarbi, y el Concierto, presentado por Francesco Micheli. (Entrada gratuita previa reserva en Eventbrite).
Gile Bae, amable y servicial, nació en Róterdam y reside en Milán. «Soy conocida por mis interpretaciones de Bach —dice—, pero elegí tocar la Sonata para piano n.º 2, op. 28, de Prokófiev. Es extraordinaria».
¿Cuál es la relación entre la música y la literatura?
La música es un método universal que aumenta la sensibilidad y la inteligencia, y facilita las relaciones con las personas. También beneficia a quienes ejercen profesiones científicas: enseña a escuchar, a estar en silencio, y lo necesitamos. La literatura aporta los mismos valores: la lectura estimula el pensamiento; si escuchas música, si te gusta leer, nunca te sentirás solo, te distanciarás de la banalidad. Ambos son buenos compañeros de vida.
Fue una niña prodigio del piano mundial. ¿Le gustaría dar algún consejo a los jóvenes?
A menudo me encuentro con chicos que acaban de salir del instituto y que ven el mundo de forma superficial. Me pregunto si lo que aprenden en la escuela les será realmente útil; hablo por experiencia propia: muchas de las cosas que aprendí durante mis años escolares ya no las he puesto en práctica; muchas, de hecho, las he olvidado. He escuchado a personas que me han dado las bases, he vivido experiencias que me han formado, he estudiado, he tocado música que me ha enseñado muchas cosas.
Vivimos en la era digital.
Y los jóvenes ya no saben escuchar, eso me preocupa mucho. Llegué a Italia con solo quince años para estudiar; solo sabía decir "pizza margarita" y "arrivederci"; la mayoría de mis compañeros, la gente que conocía a diario, solo me hablaban en italiano, lo que me obligó a escuchar con atención.
¿Cómo descubriste la música clásica?
Mi madre es violinista, incluso la radio del coche siempre estaba sintonizada en el canal de música clásica. Me gustaba la música, me entretenía... Nunca dejaré de aprender.
Il Giorno